But there's something about us I want to say

Días en los que pensaba que quizás seria complicado alcanzar un poco la felicidad, sin embargo por un momento el destino me sorprendió, de manera inesperada la oscuridad que me estaba tomando me dejó de lado por un momento. Mi mente tuvo que concentrarse en otra cosa: Él. 
A veces no sé si sentirme satisfecha con el hecho de que con cualquier cosa me hace feliz pero, tiene sus desventajas... así como puede hacerme feliz, también tiene su efecto contrario. 
En fin, siendo estos dos días una verdadera comedia romántica plasmada en mi vida y que nunca pensé que lo experimentaría debido a mi poca suerte respecto a temas amorosos... suceden inesperadamente cosas que no esperaba. 

Cuando lo divise desde lejos con ayuda de mis gafas, estaba allí, sentado esperándome en aquella banca del parque donde solíamos siempre despedirnos y muy de vez en cuando encontrarnos. Sentí antes de llegar que mi corazón explotaría e intente calmar mi ansiedad llevando mis pensamientos a cosas diferentes al momento. Éxito. Mi rostro cedió por primera vez a la calma y no se tornó de otro color diferente a mi tez blanca y mi ansiedad se limito a ser disimulada mientras llegaba allí. 
Alzó su rostro y se levanto de la banca para saludarme con un suave beso en la mejilla que devolví con gusto y cierto nerviosismo. 

- Hola 
- Hola, lamento la demora. - Sonreí y lo observe de reojo. Se veía tan bien como lo solía ver siempre. El amor me tenía totalmente cegada. 
- Toma... - Sonreía mientras sacaba el dichoso chocorramo que me debía desde hace mucho tiempo.
- No puedo creer - Le devolví la sonrisa y lo siguiente que hice fue reírme - Por fin, después de tanto tiempo me lo estas dando. Creo que voy a llorar... - Tomé el chocorramo que tanto añoraba de su parte desde hace tiempo. - Nada más falta el otro, ya tengo esperanzas. 

Durante el camino al centro comercial al cual habíamos decido ir el día anterior, charlamos acerca de ocurrencias de nuestra semana sin hablarnos por aquel inconveniente incomodo ocurrido en mi casa. Tuvimos un pequeño adelanto de historias, charlamos sobre nuestro día y una que otra discusión bastante graciosa. 
Llegados al lugar en especifico, donde él quiso ir a comer helado, decidimos que íbamos a pedir y al principio de todo esto inicialmente la que le iba a pagar seria yo. Sin embargo, decidió pagar él y por primera vez me invitó  algo.

- Me encontré 10.000 en mi maleta, así que hoy voy a ser el que gaste. 
- ¿Vas a gastar tú? - Mi mirada atónita se poso sobre él - Eso no lo puedo creer. De verdad, no hay problema si lo hago yo. 
- Está bien, hoy gastaré yo. 
- No puedo creerlo, ¿tú? ¿gastándome? creo que lo anotaré en mi diario. - Me reí y levante mi mano para hacer como si esta fuera un cuaderno y mi otra mano era el bolígrafo- Querido Diario: Hoy Alex me gastó un helado y me dio uno de los chocorramos que me debía. Creo que voy a llorar. 
- ¡Me lo dices como si nunca te diera nada! - Se limitó a reírse de mi sarcástica interpretación - Ni siquiera sabía que tuvieras diario. Además, ¿no te puedes limitar simplemente a tenerlo en tus recuerdos?
- Sabes que es molestando, estoy consciente de que yo te doy mas cosas pero no te reclamo porque sé que no tienes dinero para hacerlo, así que simplemente no puedo dejar la emoción de lado. - Volví a reírme y lo miré fijamente.- Además, no tengo diario. Sentí la necesidad de anotarlo en otra parte donde no fuera mi memoria. 

Pedí mi helado, y me senté en la mesa que él eligió. Frente a frente nos sentamos y comenzamos a hablar de cosas banas, cosas que simplemente teníamos en común y que solíamos charlar de ellas todo el tiempo sin llegar aburrirnos. Rato después, él se concentró en un audio que provenía de su celular, soltó una carcajada y sonreí al verlo reír, sin embargo solo sentía que lo hacía por cortesía, como siempre.

- ¿Quieres escuchar algo gracioso? - Mientras reía acercaba su celular a mi oído para hacerme saber el contenido de este y el motivo de su risa-. Creo que están un poco mal...

Resonó en mi mente tanto como pudo: 
"Alex, ¿por qué no vienes? ¡Aquí está tu crush!" 
Mi mente me estaba matando otra vez, así que solo me límite a soltar una pequeña risa hipócrita y sonreí haciéndole entender que fue gracioso para mi, pero que seguro si hubiera estado más atento a todo lo que conlleva una expresión se habría dado cuenta de lo molesto y doloroso que fue para mi escuchar eso. Pero, al fin y al cabo, no somos nada, ¿Por qué habría de tener en cuenta eso? 
- ¿Tenías una fiesta? ¿Por qué no fuiste? - Pose mi mirada en el helado intentando disimular mi molestia. 
- Bueno, ya les había dicho que vendría a comer helado y eso es mejor para mi - Sonrió mientras comía más helado - Además, tampoco hubiera podido, no tengo dinero y lo sabes.

Me límite a asentir y seguí mirando mi helado para disimular, cosa que funcionó. Era una gran ventaja que los hombres fueran despistados respecto  muchas cosas que intentan expresar las mujeres. El rato paso y seguía concentrado en su celular escuchando audios de sus amigos y amigas borrachos de la universidad, yo mientras tanto, fije mi mirada en una proyección de un canal de ESPN, nada importante y poco interesante, pero me distraía un poco mientras él posaba su atención en otra cosa poco graciosa para mi. 
Lo siguiente, apartó su mirada de su teléfono con una expresión un tanto confusa y supuse que se estaba preguntando el por qué no seguía charlando y de por qué mi (falsa) concentración hacía la proyección. Vi que había terminado su helado pero yo seguí posando mi mirada sobre lo poco interesante que se hacía la charla en ESPN, mi mente me estaba jugando una mala pasada y mi intento fallido por distraerme con eso se estaba haciendo evidente. Lo gracioso de esto es que vi como él se levantaba de su silla, me miró y se hizo a un lado esperando que entendiera lo que me quería decir con eso. 
-  ¿Qué pasa? - Levanté mi mirada un tanto confusa.
- Muévete, me voy a hacer a tu lado. 
- Ah, perdón, no entendía. 
Me moví hacía el costado sin decir ninguna palabra, no por pena, sino porque simplemente no entendía algunos comportamientos de él. ¿Había olvidado mencionar que soy demasiado despistada?
- ¿Escuchamos música? - Me miró y sonrió amablemente - Si es posible, con tus audífonos, los míos no son tan... suaves.  
- De acuerdo... - Saque mis audífonos y se los pasé. 
Acomodó su celular y me pasó uno de los audífonos para que escuchara con él. 
- Bueno, mientras terminas tu helado, me acostaré encima tuyo. - lo dijo mientras se hacía en mi hombro y se fijaba nuevamente en su celular. 
Yo solo me límite a mirarlo y sonreí por su actitud y creo que si lo supiera, no tendría ni siquiera que avisar que quiere recostarse en mi hombro. Pero, digamos que prefiero dejarlo en la ignorancia.
Terminé mi helado y propuse que debíamos ir a comer pizza ya que restaba mi parte del dinero que se suponía que era para el helado que terminó gastando él. Caminamos por el centro comercial para despejarnos y bajar un poco el helado, que fue más grande de lo normal. Obviamente, porque no era la primer vez que íbamos ahí. Me tomé el atrevimiento -como siempre- de tomarlo de gancho, claro que no veía ningún inconveniente, él siempre me tomaba de mis manos para intentar quitarme el frío que siempre estaba presente en ellas. Antes, me aterraba pero sentía que ahora teníamos la confianza suficiente para hacer eso y que a ninguno de los dos nos incomodara mi gesto. 
Caminamos lo suficiente hacía la pizzeria donde solía comer con una vieja amiga; ese barrio era como mi segundo hogar, claro que lo conocía más que el mio. Así que aproveche la oportunidad y lo lleve allí ya que estábamos lo suficientemente cerca. Y como buen hombre, no discute cuando hay comida de por medio en una salida. Salude a otro viejo amigo de la pizzeria, me límite a pedir una pizza para él solamente y nos sentamos. Yo desistí de la pizza ya que tenía una ligera molestia en el estomago desde que inició el día, así que desistí de la comida chatarra por ese momento. 
Él, comió su pizza con gustó y cuando acabo, levantó su dedo pulgar para darme su aprobación. Más que satisfecha, al igual que él, nos levantamos de la mesa, pagué y salimos. Nuestra siguiente parada era nuestras hogares.
De camino allá, seguimos charlando, otro rato el silencio se apoderó del momento sin llegar hacerlo incomodo gracias a la música que seguíamos escuchando. En un momento, seguía de gancho con él. sin embargo con cierta gracia tanteé su brazo en busca de calor, fallidamente ya que supuse que yo lo había absorbido y lo había convertido en frío para mí. 

- ¿Estas tocando la guitarra? - Preguntó gracioso mientras veía como tanteaba su brazo.

- No, solo estaba en busca de calor pero creo que ya me lo robe. - Me reí mientras dejaba de tocar su brazo y me rendía ante la búsqueda de calor por parte de él. Ya que, graciosamente yo produzco más frío del que una persona normal tiene y él produce demasiado calor para ser real. 

Lo que pasó después de esto me sorprendió de cierta manera, puesto que después de que desistí de seguir buscando calor para mi mano, tomó mi mano y entrelazo sus dedos con los míos. No pude seguir hablando, el frío que sentía se multiplico en mi cuerpo, excepto en una sola parte: Mi mano que estaba con la suya. Mientras que sentía que mi corazón daba vuelcos impresionantes y que bombeaba sangre a velocidades poco comprensibles, él metió mi mano junto a la suya en su bolsillo de la chaqueta para lograr darme más calor. ¡Éxito! más adelante mi mano estaba sudando frío por tanto calor. ¡Claro! había olvidado mencionar que en cierta parte odio el calor porque me hace sudar, en especial mis manos... su calor y mi ansiedad por el momento no ayudaban controlar mi cuerpo. 


- Creo que deberías soltarme, estoy sudando... 

- ¿ Y qué? - No me miró y siguió con mi mano en su bolsillo - No me molesta. 
- Pero, a mi sí. Me da pena... 

Fun fact: Soltó mi mano, solo para que quitara incómodamente mi sudor de ella y tiempo después, volvió a tomarla. ¿Por qué era así? creo que si él supiera lo que causa en mi, se detendría, estaba segura y lo sigo estando ahora que escribo esto. Igual, ¿a quién le gustaría una chica que le sudan sus manos? por favor, que incomodo. 


- Creo que debemos cambiar de lado - Paro de golpe y me soltó la mano que seguía con la suya en el bolsillo de su chaqueta. - Estas robando mi calor de ese brazo y tengo frío ya. 

- ¿En serio? nunca pensé que pudiera quitarte tu calor, debería ser al contrario. - Me reí y me cambié de lado.

Aproveche un segundo para tomar el frío del ambiente y calmar mis manos, pensé por un momento que quizás ahí ya había parado mi momento con su mano y la mía. Pensé y mala opción, ¿debería ponerlo como nota mental? pondría algo como: Por favor, no confíes plenamente en él, en algún momento te causará un paro cardíaco con algún movimiento inesperado de su parte. ¡Pum! ahí estaba él otra vez, sin preguntar tomó mi mano y entrelazo sus dedos con los míos con cierta fuerza. Atónita, me límite solo a seguir la conversación que teníamos, como si lo que estaba pasando realmente no fuera algo que me impresionara y mucho menos me intentara dar un paro cardíaco. Y está vez fue diferente, no guardó nuestras manos en su bolsillo - A lo cual antes pensaba que por algún motivo, le daría vergüenza que la gente nos viera tomados de la mano - siguió con nuestras manos y dedos entrelazados, a la vista de todos, como si no le molestara y mucho menos le importara la opinión de los demás. Porque bien, tú no tomas de la mano a cualquier persona a no ser de que sea importante para ti, ¿me equivoco? Bien, quizás no, pero lo que si podría ser visible a los ojos de los demás era que podríamos ser una pareja de jóvenes. Nada relevante, no para la sociedad, muchos jóvenes pasaban tomados de la mano, nosotros solo eramos una "pareja" más, ¿no? Pero, ahí viene el problema. Nosotros no eramos pareja, no eramos realmente nada que vinculara lo amoroso. Solo eramos simples amigos. ¿Quién lo sabría a parte de nosotros? cosas que quizás cuando él me tomó de la mano, no le importaron. Realmente, no le importa mucho lo que opinen los demás. Sin embargo, aunque me duela pensarlo, su acto, que para mi fue algo que removió sentimientos en lo más profundo de mi ser, podría ser simplemente un acto de amabilidad de su parte. Yo, simplemente no dejaba de ilusionarme, ¿quién en su situación no lo habría hecho? estaba siendo más amable de lo normal. Cosa extraña porque en eso él y yo concordábamos que nos parecíamos... No solíamos expresar nuestros sentimientos con facilidad. Si lo hacíamos, pues bueno: ¡Bienvenido a nuestro mundo! 


Llegamos a lo que fue el comienzo de la salida: el parque. Nuestras manos habían dejado su puesto hace unas cuadras atrás, quizás yo estaba consciente de que temíamos que nos viera alguien un día de entreno que los dos habíamos faltado por salir juntos a comer. Esa salida que había sido algo como una reconciliación respecto al motivo que nos incomodó y nos alejo unos días. Yo no podía dejarla pasar y no sabía si él también, que muy posible fuera por otro motivo, pero sin embargo terminamos saliendo. 

En el parque seguimos en nuestra charla en la misma banca que habíamos tenido otra charla diferente el día anterior. Él se recostó en mis piernas, mientras seguíamos hablando, cambiamos y luego yo era la que estaba en sus piernas, mirando hacia el cielo, donde la luna se hacía presente, marcando su territorio con la luz que emanaba de ella. Me dejé llevar por mis pensamientos mientras él volvía a observar su celular. Bien, nuevamente mi mente con pensamientos negativos me alejaba de la realidad. No podía quejarme, no podía ser nada sincera con él. Quería decirle lo mucho que me molestaba que charlara sobre cosas acerca de su "crush", él por qué y también preguntarle el por qué era así conmigo. Siendo sincera no necesitaba falsa amabilidad, necesitaba un amor reciproco. Pero, eso me convertiría en una persona egoísta sabiendo que muy posiblemente él no sintiera algo por mi. Algo más para torturarme: Era una mierda de persona por pensar eso. Si él escuchara mis pensamientos, creo que solo podría disculparme hasta el cansancio. 

- Bien, creo que tengo que irme ya. 

- Oh, de acuerdo. Ya debe ser tarde, lo lamento. 

Me levanté de la silla y él me dio un beso en la mejilla como signo de despedida. Sin embargo, me abrazo y me llevo sin soltarme del abrazo hasta el poste donde solíamos irnos cada uno por su camino.


- Espera... recuerdas que soy torpe, creo que me voy a caer. - Me tambalee y pensaba que me iba caer junto con él 

- Te abrazo hasta allá para darte algo de calor - volteó conmigo y él quedó de frente viendo hacia donde caminábamos - Porque estas más fría. 

Llegamos y celebre que lo hiciéramos sin que yo causara alguna herida para mi y mucho menos para él. No me solté del abrazo, lo abrace más fuerte y le hice saber que estaba caliente, como un oso. Él simplemente río. Nos soltamos y nuevamente, se despidió de mi con un beso en la mejilla sin saber, cuando nos volveríamos a ver. 

De camino a casa, sentía un impulso por devolverme y confesar mis verdaderos sentimientos, hacerle saber lo importante que es en mi vida y que nunca supe que lo iba hacer así en un futuro. Ser sincera y confesar lo mucho que me afectan las cosas que hace y dice conmigo. Sin embargo, sé que esto lo haría sentir culpable y lo único que haría es hacerlo sentir mal. Y creo que nunca podría hacer sentir mal a alguien que amo. Por lo tanto creo que esconder mis sentimientos está bien por ahora, aunque a mi me duela y él no lo sepa, creo que es lo mejor para los dos. Simplemente, estoy asustada y soy débil, no quisiera que nuestra relación se dañara. Pero, recuerdo que a veces, realmente pareciera que no tuviera sentimientos, tengo miedo de mi y de pensar en algún momento que podría ser más fácil expresarle mis sentimientos si estuviera muerta. Pero, mi otra parte, la que todavía es cuerda, sabe lo mucho que le afectaría. La culpa lo haría sentir lo suficientemente mal y no quisiera eso. ¿No realmente? ahí voy, de porque decía que era una mierda de persona. Claro que, aunque eso pase por mi mente seguido, nunca podría hacerlo sentir mal. Si esta bien que estemos juntos sin que pase algo, no importaría, realmente solo me importa que siga conmigo y aunque bien, no suela demostrar sus sentimientos al igual que yo, sé que al menos me aprecia lo suficiente como para saber que soy algo importante para él. 

Bien, Alex, si esto llegará algún día a ti y yo no estoy, simplemente, quiero ser sincera, ¿así funciona el escribir no? pienso que es mejor que hablar, puedes ser sincero hasta el punto de avergonzarte. Creo que te amo, no estoy segura si demasiado, realmente no estoy segura de nada. Pero sé, que en lo que llevo viviendo y un poco más que tú, nunca había sentido lo que siento por ti por alguien. Al menos, me hizo saber que sigo siendo una persona y que estoy viva todavía. 


It might not be the right time
I might not be the right one
But there's something about us I want to say
Cause there's something between us anyway










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